“Shaker” es el segundo álbum de Johansen con los Harry Smiths, el disco está formado por canciones recogidas de la cosecha de clásicos del country blues, hechos famosos por artistas de la talla de Son House, Mississippi John Hurt, y Charley Patton (una excepción notable: "Mi morfina ”de Gillian Welch, que encaja a la perfección en la mezcla).
Al igual que gran parte de su material del pasado, la teatralidad en las interpretaciones de Johansen es sin duda evidente en esta ocasión; Johansen evita asumir el papel de un músico de blues envejecido, pero en última instancia suena como un actor haciendo el papel de un músico de blues en lugar del cantante de blues en sí mismo. Eso no quiere decir, sin embargo, que Johansen no calor y honestidad en estas canciones, el siempre ha sido un artista con brío, también es apasionado y sensible, y no deja de dar la lectura dramática a su papel para ensalzar al actor que tiene la necesidad de comunicarse hasta con la última fila del teatro.
El resultado es una colección de canciones en las que que rinde homenaje al blues clásico del país y al mismo tiempo añade un toque al más puro estilo David Johansen, y no sólo es su entrega fuerte y convincente, también su voz es más suave de lo que ha sido en años.
Mientras decenas de artistas de blues moderno han tropezado al tratar de volver a recrear el sonido del pasado, David Johansen ha adoptado un enfoque realmente diferente a la idea, y en esta coctelera los resultados son realmente impresionantes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario